Por Lorena Tablada
En un barrio de Romero, la indignación y la preocupación se han apoderado de los vecinos de la zona debido al estado de abandono en el que se encuentran las calles que transitan a diario. Desde el sector de la urbanización próxima a la intersección de las calles 177 entre 528 y 529, los residentes han alzado su voz para denunciar la situación caótica que enfrentan a diario.
"Desde hace tiempo venimos luchando contra la falta de mantenimiento en las calles de nuestro barrio. Hemos llamado a la municipalidad, enviado fotos, escrito al intendente, y la respuesta que recibimos es el silencio y la inacción", expresó una de las vecinas afectadas.
La problemática se agrava ya que los escolares, trabajadores y residentes en general no solo se enfrentan a calles intransitables, sino también a la peligrosa carencia de iluminación que torna difícil e inseguro transitar durante las primeras horas del día y la noche.
Según testimonios de los vecinos, la situación que atraviesan ha generado un grave peligro para la integridad física de la comunidad, ya que servicios esenciales como el paso de ambulancias y el acceso de vehículos de emergencia se ven severamente limitados.
"¿Están esperando que ocurra una tragedia para actuar?", cuestionó un vecino, evidenciando la preocupación latente en la comunidad.
La situación se torna aún más crítica cuando se revela que solo tres cuadras separan al asfalto seguro
con el caos de las calles sin mantenimiento, lo que para los residentes representa una diferencia crucial entre vivir dignamente o en constante peligro.Los vecinos solicitan encarecidamente a las autoridades municipales que atiendan su reclamo y procedan con la reparación y mantenimiento de estas calles, brindando así un entorno seguro y habitable para todos los residentes de la zona.