La inseguridad sigue siendo una preocupación creciente en la zona norte de La Plata, con recientes incidentes que han dejado a los vecinos alarmados y en estado de alerta.
En el barrio de Ringuelet, en la intersección de las calles 2 y 516, un matrimonio vivió una noche de terror cuando, a la 1:00 de la madrugada, escucharon una explosión que los despertó. Descubrieron que los delincuentes habían derribado la reja de su casa y robado la bomba de agua, dejando a la pareja con una sensación de vulnerabilidad y miedo.
Mientras tanto, en City Bell, en la intersección de las calles 477 y 27, tres individuos encapuchados y con guantes asaltaron a una mujer que se encontraba sola en su casa. La víctima fue amenazada, tirada al suelo y despojada de su teléfono celular, billetera con dinero y el juego de llaves, dejándola traumatizada por la experiencia.
La creciente ola de delitos ha llevado a los vecinos de City Bell a tomar medidas extremas, con algunos participando en una reunión para discutir la posibilidad de armarse como forma de defensa
contra la inseguridad. Estas acciones son un reflejo del temor y la desconfianza que se ha extendido por la comunidad, como se evidencia en la declaración de un residente: "No queremos otra Emilia Merlo", en referencia a la médica veterinaria que falleció de un infarto 48 horas después de ser asaltada en su propia casa en City Bell.Estos eventos han generado una creciente preocupación entre los residentes locales, quienes claman por una mayor presencia policial y medidas concretas para abordar el problema de la inseguridad en la zona norte de La Plata. Mientras tanto, las autoridades locales se encuentran bajo presión para abordar esta situación y proporcionar a los ciudadanos la seguridad y protección que merecen.
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