Siguiendo directivas emanadas por la SUPERINTENDENCIA del AREA METROPOLITANA DE BUENOS AIRES 1, y a su vez a través de la Jefatura de Coordinación de Policía Quilmes y Jefe Distrital de Quilmes Oeste a cargo del COMISARIO INSPECTOR NICOLAS ATILIO ORDAS, es que Titular de la COMISARIA QUILMES SECCIONAL SEPTIMA, a cargo del SUBCOMISARIO MIGUEL EDUARDO DURAN, transmitió órdenes precisas a su personal subordinado, respecto a la labor en cuanto a la prevención de ilícitos y faltas en general y en llevar a cabo investigaciones tendientes al esclarecimiento de distintos delitos que pudieran haberse perpetrado en el distrito o zonas lindantes.
Con las directivas dispuestas por el Mando Superior, el Titular de la Comisaria de Quilmes Seccional Séptima, SUBCOMISARIO MIGUEL EDUARDO DURAN; emanó una serie de directivas a todo su personal subordinado; oportunidad en que se recibe un llamado telefónico de una mujer que solicitaba auxilio, ya que su pareja la estaba sometiendo a una golpiza. Dado que el domicilio indicado por la víctima, distaba a escasos 150 mts., el SEGUNDO JEFE DE LA COMISARIA, SUBCOMISARIO MARCELO WALTER MARECOS, dispuso que dos efectivos lo acompañaran a pie, luego de solicitar que un móvil oficial acudiera al lugar de los acontecimientos.
Una vez en la morada, donde se producían los sucesos, se mantuvo entrevista con la mujer, de 35 años, que denunciaba que su concubino, de 25 años, la sometía a golpes casi a diario, y en alguna oportunidad, luego de efectuada una denuncia en el mismo sentido, el violento tuvo una restricción de acercamiento. En esta oportunidad, la mujer tenía evidentes señales de golpes y sangrado, motivando que el Subcomisario
Marecos, dispusiera que personal femenino la contuviera en el lugar y mientras la pareja era correctamente identificada, el individuo golpeador, comenzó a amenazar de muerte a su concubina, por lo que ante un delito en flagrancia, es decir la amenaza de muerte efectuada contra la mujer, se APREHENDIO de inmediato al violento, en orden al delito de AMENAZAS IN FRAGANTI Y LESIONES, trasladándolo de a la seccional policial y por separado a la agredida.
Una vez en la comisaria, se mantuvo comunicación con la Fiscalía interviniente, quien avaló lo actuado por el personal policial, disponiendo un amplio reconocimiento médico legal respecto de la víctima, las medidas procesales en este tipo de eventos, y tras ser trasladado a sede Judicial, el imputado fue notificado de una nueva restricción de acercamiento respecto de la mujer maltratada física y psicológicamente.
De esta manera, el agresor ahora no podrá acercarse a la mujer ni a su domicilio por un radio bastante amplio, disponiéndose que personal policial, recorra las inmediaciones del lugar, a efectos que se asegure que, en efecto, el agresor no traspase el cerco perimetral virtual, dispuesto por la Justicia.
