Hoy es otro día de violencia en Ferguson, Estados Unidos, donde el racismo muestra su cara más cruenta: la de la muerte, la injusticia -a manos de quien debiera ser auxiliar de la Justicia-.
Esto pasa con la complicidad de los grandes medios que por inacción u omisión o mejor dicho, defensa corporativa de un modelo opresivo, se horrorizan cuando los saqueos o robos suceden en América Latina. Pero cuando el acontecimiento se instala en el corazón del "País de la Libertad", sugestivamente su difusión es pobre, difuso o inexistente.
Por estas horas hay muerte, saqueos y destrucción del tejido social en Estados Unidos de Norteamérica. Es paradójico, pero la rapidez que tienen en difundir los problemas de los gobiernos
latinoamericanos no se condice a la hora de reflejar su propio caos.
¿La CNN es sinónimo de libertad de prensa o libertinaje de empresa?
