Días atrás autoridades del Club Universitario de La Plata anunciaron públicamente la decisión de ceder a un grupo inversor la sede de calle 46 entre 2 y 3 para la ejecución de un proyecto inmobiliario. También se dio a conocer que podrían desprenderse, además, de la sede náutica que la entidad posee en Punta Lara, en Ensenada.
Un grupo de socios, vecinos y deportistas se unieron para rechazar esa decisión y dar a conocer la problemática que existe hoy por hoy en el Universitario."Todo empezó a fines del 2012 donde a partir de una situación financiera difícil que está atravesando el Club por una deuda muy grande, las autoridades del Club unilateralmente, sin la consulta previa a los socios, inició una acción judicial y entró en un concurso preventivo, como medida preventiva para evitar la venta eventual de algunas de las sedes, en relación al reclamo que tienen los acreedores por esa deuda", explicó Martín Garmendia a Radio Gonnet 105.1 Mhz y Gonnetdigital.
"En ese momento, nos llamó la atención que el Club tome esa decisión sin consultar a los socios, es algo que está previsto en el estatuto. Una vez tomada la decisión tampoco se avisó. Nosotros como deportistas que somos de Jockey y Rugby principalmente, aunque Vóley y Básquet también se están sumando y también hay muchos socios históricos de la sede de Punta Lara que están muy preocupados con esto", agregó Garmendia.
"Nosotros nos enteramos a través de rumores judiciales que empezaron a correr en los tribunales de la ciudad y nos llegó a partir de gente que está vinculada al club que se preocupó y nos alertó de esta situación. Como deportistas, estamos casi todo el día en el Club y nunca nos enteramos", sostuvo.
El Club posee alrededor de 3500 socios y se vería afectada la sede ubicada en Gonnet que tendría que absorber las actividades que se realizan en esos predios, razón por la cual debería modificar sus instalaciones. "La Comisión Directiva cree que es una masa societaria que está reducida respecto de lo que es la masa societaria histórica del club y ve como una alternativa achicar el club para adaptarla a la cantidad de socios que tiene actualmente la institución. En vez de pensar en agrandar ese número de socios cree que debe adaptarse y reducirse".
"Todo el tiempo estamos hablando de lo que se debe, de los acreedores, de las deudas, de cuestiones que son económicas pero nosotros lo que creemos es que no es una empresa que no está obligado a generar ganancias. Un Club cuando es deficitario no está fracasando. Porque la función de un club va mucho más allá de las cuestiones económicas. Nosotros creemos que el Club es un espacio para el desarrollo y el mantenimiento de redes de relaciones entre las personas que acuden al club y que son socios. Su función es esa: promover, generar y mantener las relaciones entre los socios a partir de actividades deportivas, sociales o culturales"- reflexionó el joven-"embarcarse como pretende la Comisión en proyectos inmobiliarios, en ventas millonarias no es justamente la principal actividad que debería desempeñar"
Las autoridades estarían buscando la posibilidad de que un grupo inversor construya a través de un fideicomiso tres torres que albergarían oficinas y cocheras subterráneas en el predio del centro de la ciudad.
"El Club entraría en un fideicomiso junto a agentes inmobiliarios de la ciudad. Obviamente el Club no tiene el capital para hacer la inversión así que solo aportaría el espacio. Después a futuro quedaría un porcentaje de ese proyecto en manos del club. Creemos que es un error pensar de esa manera, porque es perder definitivamente la sede tanto la sede del centro como la sede náutica", detalló Garmendia
"Creemos que eso va a achicar el club y tampoco sabemos como va a repercutir sobre la sede de Gonnet. Al tener menos actividades y al tener menos socios y relocalizar las actividades que se hacen actualmente en las dos sedes", sentenció.
El grupo de deportistas y socios planteó una solución que pasaría por ampararse en la Ley Racing para que se proteja el patrimonio del Club para que este entre en un plan de pagos con los acreedores y negociar la deuda pero una de las condiciones sería que el Club no puede vender ni afectar su patrimonio para pagar esa deuda.
De acuerdo a lo informado oficialmente a los socios por las autoridades del Club, el Universitario
debe actualmente 20 millones de pesos. de eso 20 millones, nueve se le debe a la AFIP, 5 millones a UTEDIC (gremio de las entidades deportivas y civiles) y alrededor de 6 millones a un fideicomiso Banco Provincia y después acreedores menores por cuestiones de juicios laborales.
Según denunciaron los deportistas, desde las autoridades se plantea la venta como una situación que no tiene vuelta atrás a pesar del desacuerdo de la mayoría de los socios aunque algunos miembros han comprado el discurso de que "frente a un monstruo de 20 millones de pesos, no hay otra salida".
"Hay que evaluar la situación y no caer en al salida más fácil que es estar amputando los miembros del Club para saldar una deuda tan grande", insistió el deportista.
Los socios que rechazan la venta de parte del patrimonio del universitario iniciaron una campaña de difusión a través de las redes sociales mediante un grupo abierto en Facebook "La U no se toca" y una cuenta en Twitter que es @laUnosetoca
