Radio Gonnet: -¿Siente que la Justicia le llega a toda la Sociedad o sólo a una parte?
Marcelo Romero: -No, tenemos una deuda gigantesca. Hablo de la Justicia Penal, exclusivamente, para no hacer como otros colegas que hablan de otros fueros, hablo exclusivamente de la Justicia penal de la que formo parte, de la que soy responsable. No me puedo hacer responsable de todos los problemas de la Justicia pero sí de los de mi cuota parte. No estamos dando una respuesta adecuada a la comunidad, no solamente como Justicia Penal sino como sistema penal todo. Ya acá integrando al Poder Ejecutivo con sus sistema de prevención, con la policía, con el sistema penitenciario. O sea, todo integramos el sistema Penal. Son distintas áreas, distintos momentos, de proceso pero no, esa respuesta es mala, no es adecuada y por eso la bronca de la gente. Cuando la gente dice: no hay Justicia, se refiere a nosotros. No habla de la Justicia Comercial, de la Justicia Civil, que tendrá sus problemas pero creo que la comunidad ve como, muchas veces, la delincuencia avasalla los derechos de la gente y reitero, no tiene esa respuesta que está esperando y que deberíamos dar. No estoy hablando de mano dura, de tolerancia cero, de todas esas posturas extremistas. Ahora estamos en el otro extremo, estamos en el abolicionismo del Dr. Zafaroni y sus seguidores. La Justicia, justamente, es el equilibrio. Es nuestro símbolo que es la balanza que habla del equilibrio. Tenemos que dar una respuesta adecuada, cumpliendo la Ley, siendo garantistas. No hay que confundir garantismo con abolicionismo. Garantismo es el cumplimiento de todas las garantías constitucionales. Todos debemos ser garantistas. Si no lo somos, estamos violando la Constitución, violando nuestro juramento. A veces, se habla del juez o del fiscal garantista en forma despectiva. El ciudadano debe saber que si un fiscal o un juez no es garantista es mal magistrado. Distinto es cuando toma posturas extremas, como el abolicionismo que hoy está en boga en las Facultades de Derecho de casi todo el país, en los Consejos de la Magistratura y esto está tiñendo de una u otra forma nuestra función porque hoy día pareciese que el delincuente tiene mayores derechos que la víctima. y esto no es así.
"Los Derechos Humanos deben ser para todos"
"La vigencia de los Derechos Humanos debe ser para todos. Para imputados, fundamentalmente, están sometidos al poder punitivo del Estado, al poder penal del Estado, pero también para la víctima que, muchas veces, ya no está en este mundo. Entonces, le queda a sus deudos sus familiares, la reparación que le podamos dar; que nunca va a ser devolverle a su ser querido en el caso de los homicidios, pero de una u otra manera, hacer esa Justicia que tanto se nos requiere. Para dar una respuesta simple: No, no estamos dando una respuesta adecuada, no estamos llegando debidamente a todo el mundo y se necesita un mayor acceso a la Justicia. Yo creo que deben ser las grandes reformas que se deberían dar y no otras. No politizar a la Justicia. La Justicia no debe ser política La Justicia no es democrática, o sea, la Justicia es republicana. La democracia es la forma de gobierno, de república que hemos elegido. La Justicia, es justamente, el contra-poder; el que controla los poderes políticos. Mal controlaríamos a un poder político si fuéramos políticos. Esto no lo decimos nosotros, esto lo concibió Alberdi, Vélez Sárfield, los Constituyentes del ´53; los Constituyentes del
´94, los que ratificaron la Constitución original de la República Argentina y que queremos seguir defendiendo y por ella juramos todos los magistrados del país", explicó el fiscal Romero en diálogo con Radio Gonnet.
Radio Gonnet:- ¿Se ha sentido frustrado alguna vez?
Marcelo Romero: -Sí, muchas veces, sobre todo en la tarea de fiscal. Cuando uno no puede averiguar la verdad. Cuando uno no llega a la Verdad y el hecho queda impune, justamente por no poder llegar a descubrir lo que pasó, es la mayor frustración. Eso nos pasa, lamentablemente, muy seguido. Cuando sabemos que hubo una víctima de verdad, cuando sabemos que detrás de ese expediente hay una persona que sufre y todo una familia y no le podemos dar esa respuesta porque no encontramos las pruebas para poder procesar a alguien, para poder decir esta es la persona que causó el daño, esta es la persona que va a ser sometida a juicio, la persona que eventualmente va a recibir la condena. Y tengo un caso paradigmático, para sacarle dramatismo, porque también la frustración se da en casos que no tengan que ver con el homicidio, la violación o el robo calificado.
La Reforma de la Justicia
Radio Gonnet: -Hoy se habla mucho de la politización de la Justicia y de que habría que reformar la Justicia. De tener que reformar La Justicia, qué habría que hacer?
Marcelo Romero: -Para empezar a hablar en el fuero penal hay que salir de este dilema ideológico no resuelto entre el abolicionismo penal que hoy está vigente y la mano dura de
tolerancia cero. Evidentemente, no podemos estar entre esos dos extremos. Porque la Justicia no es blanco o negro. Si bien, una persona es inocente o culpable para llegar a esa conclusión hay un montón de grises. Por otro lado, salir de estas burbujas Ideológicas y estar en más contacto con la realidad, olvidarnos un poco esas doctrinas que tanto nos llenan la cabeza, alemanas, italianas, que son muy buenas, justamente, para cuando estudiamos. Pero después tenemos que acordarnos que estamos en el Río de la Plata, ni en la Lombardía, ni en la Baviera. Estamos en la provincia de Buenos Aires, en el Río de la Plata, muy cerquita de los cordones del conurbano y con una realidad criminal completamente diferente a la de Alemania, a la de Holanda, y todos esos países que tanto admiramos en sus legislaciones. Creo que se necesita un acceso a la justicia mucho mayor al actual. Tiene que haber más magistrados, tiene que haber más defensores oficiales, tiene que haber más abogados públicos que representen a las víctimas. En fin, hay una cuantas reformas por hacer. Creo que el sistema recursivo es demasiado excesivo. Hay demasiadas instancias judiciales. Ahora se está planeando, ya es Ley en la Nación hacer más Cámaras de Casación, crear más instancias yo creo que hay que quitar instancias. No puede durar una causa durar 20 años porque nunca tiene sentencia definitiva. No es justo para nadie ni para la víctima ni para el imputado. El imputado nunca tiene sentencia definitiva, la víctima nunca sabe si esa persona va a quedar en la cárcel o a recuperar su libertad. Porque la sentencia se extingue en el proceso. Creo que tenemos que formar hablando un poco más integralmente sistema penal, formar a la policía como verdadero auxiliar de la Justicia. Crear definitivamente la Policía Judicial tener una capacitación permanente para todos los magistrados no solamente a nivel derecho, sino, también a nivel gestión, a nivel liderazgo, los fiscales no somos solamente representantes del Ministerio Público y representamos a la comunidad de los procesos penales si no que también lideramos equipos de trabajo A nosotros nadie nos enseña dirigir una oficina lo aprendemos a los ponchazos y a veces cometiendo errores con nuestro personal. Ya que tanto ahora se habla de gestión y todas esas palabras que se toman del managment, liderazgo, gestión, articulación. Todas esas palabras de moda, bueno, todas esas palabras deberían aplicarse realmente más allá de los términos en la formación permanente de los magistrados como magistrados y como funcionarios de un poder público tan importante como el judicial. Y empezar a respetar el Poder Judicial como un poder del Estado; no llamarle agencia, como le gusta decir a los alumnos del Doctor Zafaroni, no llamarnos operadores, los magistrados no somos operadores de hecho es una ciencia no es ni un arte ni un oficio, y por las palabras parecen algo menor comienzan los problemas porque si se le falta el respeto a una institución, a un poder del Estado, se llama agencia cómo si fuese una agencia de loterías o una agencia de viajes a un poder del Estado, después no nos quejemos que el Poder Judicial tiene mala imagen.
La imputabilidad de los menores delincuentes
Radio Gonnet: ¿Cuál es su opinión como Fiscal cuando toma conocimiento de una causa donde un menor como modus vivendi como su sistema de vida es robar y hasta la policía, a veces, tiene miedo de actuar o siente que se pierde en la burocracia y el papelerío?
Marcelo Romero: Me expresé varias veces con el tema del menor delincuente. Yo creo que la imputabilidad del menor por la edad debe ser revisada pero no subir o bajarla. Debe ser revisada desde el punto de vista científico. Ya no tenemos que hablar de una determinada edad sino de un tema de comprensión psiquiátrica y psicológica. Acá tienen que opinar los expertos si un chico de 10 años, de 11, 12 o de 13, de la edad que sea, comprendió o no la criminalidad de un acto. Eso es lo que tenemos, de una vez y para siempre, que discutir ahora cada vez que se propone discusión en lugar de discutir y debatir ideas y de oponer argumentos y contraargumentos aparece el panfleto. La República Argentina es una república panfletaria. La República de frases. Cuándo el gobernador Scioli, con el cual yo tengo muchas disidencias, respetuosas porque es nuestro gobernador, pero tengo muchas disidencias, El, debo reconocer que fue uno de los pocos que quiso, que planteó el debate. El no dijo hay que bajar la edad de imputabilidad. El dijo hay que discutir sobre la imputabilidad. Porque el Código Penal es del año ´22. Es decir que, tranquilamente se podría discutir. Casi lo cuelgan en la Plaza San Martín, y lo que se opuso a eso fue un panfleto que todavía está vigente es ningún pibe nace chorro. El panfleto preferido cuando se habla de imputabilidad en ningún pibe chorro. Entonces yo le contesto otro: chocolate por la noticia. Obviamente que ningún pibe nace chorro.Nadie nace de ninguna forma. Gracias a Dios que nacemos. Es muy difícil nacer, porque de un millón de espermatozoides llega uno a fecundar el óvulo, así que, es muy difícil que las mujeres queden embarazadas y muy difícil que a veces lleguemos a buen puerto, es decir a las 9 meses. Así que ya es difícil nacer. Claro que nadie nace chorro. Pero esa no es la discusión, la discusión es qué hacemos con el menor qué delinque. Y no alcanza solamente con establecer la imputabilidad o la no-imputabilidad. Sino qué hacer después. Si tiene que tener un proceso especial, si tiene que ir a una cárcel del menor, si tiene que ir a un instituto, si tiene que ir a una granja, si tiene que ir a un consultorio, si tiene que ser internado, etc, etc. Mientras tanto, tenemos una realidad que es así, que es indiscutible. Los menores siguen delinquiendo, siguen robando, muchas veces sin matando. Y las víctimas se mueren sin importar si el que gatilla el arma tiene 18, 17 ó 14.
Radio Gonnet: - Los ciudadanos comunes aveces sentimos que en este momento hay más justicia para el delincuente o quizás más garantías que para la víctima. ¿Por qué siente eso al vecino, por qué sientes eso la gente común?
Marcelo Romero: Yo creo que las garantías deben de existir siempre. Para el peor delincuente, para el peor crimen, la mejor defensa. Lo que pasa es que a veces irrita que las garantías se hagan públicas en el caso de los imputados. Y también la gente a veces espera que los organismos de derechos humanos acudan en favor de las víctimas. Los organismos de derechos humanos actúan justamente porque están para defender los derechos humanos de las personas sometidas al poder del Estado, al poder punitivo del Estado. Para defender los derechos humanos de las víctimas estamos los fiscales, eventualmente, el organismo derechos humanos víctimas es la Fiscalía, es el Ministerio Público. Lo que pasa es que hay un rótulo que pareciese que exclusivamente eso son derechos humanos de los imputados. Las Garantías deben defenderse porque sino no sería un sistema de Justicia sería un sistema de venganza. Si tenemos que darles mayores garantías a las víctimas. Mayores garantías a los denunciantes, mayores ventajas a la persona que accede a la justicia penal, para hacer una denuncia, para seguir un proceso penal. Yo creo que es una cuestión de irritación, pero las garantías de las víctimas se respetan y somos nosotros los integrantes del Ministerio Público Fiscal quienes los representamos. Tal vez las críticas deberían ser giradas hacia nosotros y no hacia los organismos de derechos humanos que tienen ese rótulo pero bueno para ser completos deberían ser organismos de derechos humanos de las personas sometidas al poder punitivo del Estado.
El poder sin control transforma al funcionario en tirano
"No hay que criticar a esos organismos, al contrario yo creo que tendría que haber cada vez más porque nos controlan y los fiscales y jueces debemos ser controlados. En el caso de los fiscales por los organismos de Derechos Humanos, por la prensa, por la comunidad en general. Yo no estoy en contra del control, al contrario, estoy convencido que el poder sin control transforma al funcionario en tirano", finalizó el Fiscal Marcelo Romero.
Leer entrevista completa y escuchar audios
en: http://fmgonnet.blogspot.com.ar/2013/06/adelanto-entrevista-exclusiva-al-fiscal.html