Hoy a partir de las 18 se realizará una reunión para sumar a City Bell en el desarrollo del Programa de Alfabetización para Adultos llevado a cabo por la Municipalidad de La Plata y la fundación Un Mundo Mejor es Posible.
El método de alfabetización para adultos denominado "Yo, sí puedo" es llevado a cabo por la Municipalidad de La Plata y la fundación Un Mundo Mejor es Posible en los barrios de Villa Elvira, Melchor Romero, Villa Elisa, Altos de San Lorenzo y San Carlos.
Hoy, se hará una convocatoria abierta para vecinos y representantes de organizaciones sociales de City Bell a partir de las 18 en la Ermita de Schoenstatt (28 entre Cantilo y 473 bis) para comenzar a desarrollar el programa en dicha loclaidad.
La charla de presentación sobre "Yo, si puedo" se realizó a fines del año pasado en el Salón Dorado del Palacio Municipal y estuvo a cargo del intendente Pablo Bruera, la concejal del Frente para la Victoria-Partido Justicialista Julia Larcamón y el coordinador del programa Ángel Navarro, docente cubano.
El método fue desarrollado en Cuba por la educadora de ese país Leonela Relys Díaz, y entre 2001 y 2009 permitió alfabetizar a unos seis millones de personas en todo el mundo y, a partir de noviembre, "Yo, sí puedo" llega a Altos de San Lorenzo para educar a los vecinos del barrio.
Larcamón informó que el programa de alfabetización apunta a "enseñar a leer y escribir a unos 6.000 platenses y a otras 3.000 personas que llegan a la Ciudad como trabajadores temporarios en el cinturón frutihortícola".
La edil explicó que utiliza medios audiovisuales y una persona que actúa como "facilitador" para transmitir los conocimientos. "El facilitador es el vínculo entre la clase audiovisual y el participante y desempeña una función importante en lo referente al trabajo con la parte afectiva del iletrado, además de controlar el proceso de aprendizaje", señaló la concejal.
La clase se da a través de un video que hace las veces de mediador entre el alfabetizador y el participante. Por esa razón es que los encuentros se pueden realizar de manera particular, en un aula o hasta en una casa. El programa lo puede realizar cualquier persona a cualquier edad. No existe límite para alfabetizar.
"El programa nace por los años 60 en Cuba, con un objetivo de corto plazo ya que tiene una duración de 3 meses y medio aproximadamente, y logró que Cuba quedara libre de analfabetismo en muy poco tiempo. Este proyecto está basado en la solidaridad porque, la dos partes, tanto el analfabeto como el alfabetizador, tienen que establecer necesariamente un vínculo solidario donde uno ayuda al otro y las dos personas terminan enriqueciéndose de la experiencia que es aprender a leer y escribir", señaló Larcamón, y añadió: "Esto les permite acceder a la secundaria o a la primaria tradicional una vez que ya tienen un bagaje de conocimiento".
"La idea se dio también en Venezuela, que quedó libre de analfabetismo con este proyecto, con un plan que se hizo sumamente intensivo: durante tres años bajaron asesores cubanos para alfabetizar y hubo casos donde gente que recibía del programa "Yo, si puedo" terminó ayudando a otras personas a leer y escribir. A la finalización se les toma una evaluación de los contenidos aprendidos y se les entrega un diploma simbólico como que ha terminado el proyecto", concluyó la concejal.
Por su parte, Ángel Navarro, doctor en Ciencias Pedagógicas y representante del Ministerio de Educación de Cuba, indicó: "Esta tarea tiene un antecedente en La Plata hace varios años atrás, cuando un grupo de compañeros de varias organizaciones ya lo desarrollaron en algunos barrios, pero a un ritmo que no era el adecuado."Por lo tanto, ellos se sumarán al Municipio para lograr en conjunto alcanzar la meta de cero analfabetismo".
"En Cuba, si bien el país tiene otras características y otras condiciones, hace 50 años se libró la batalla contra el analfabetismo y en menos de un año se declaró país libre de analfabetos", indicó el coordinador.
"Para llegar a Argentina y otros países, ha sido necesario un arduo trabajo de contextualización de programas a las características de idiosincrasia y a sus métodos de enseñanza de cada uno de los pueblo", afirmó Navarro.
"Cabe recordar que es un trabajo pedagógico en conjunto entre Cuba y Argentina, y es importante el aporte que cada argentino puede dar al desarrollo del programa", concluyó el cubano.
De esta forma, la Municipalidad de La Plata busca alcanzar el rango de "ciudad con analfabetismo cero" que concede la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura
