Un ladrón ingresó a un kiosco de 11 y 54 cerca de las 21 horas y tras amenazar con una pistola al empleado sustrajo la recaudación y un celular. En el momento que intentaba darse a la fuga, un policía que estaba de franco de servicio lo interceptó y redujo. sin embargo, sin que nadie lo esperara apareció un cómplice que lo aguardaba en una moto cerca del lugar y se tiroteó con el efectivo. Finalmente ambos delincuentes lograron escapar del lugar y estarían siendo intensamente buscados.
Por fortuna, a pesar del fuego cruzado, no se registraron heridos.