Tres horas duró el corte de luz de esta madrugada. La mercadería perdió la cadena de frío y nadie se hace responsable de los dolores de cabeza que nos da Edelap a los usuarios
La historia de nunca acabar es la que vivimos los vecinos y comerciantes de Gonnet con el servicio de la empresa Edelap que a pesar de todos sus anuncios y propagandas en los grandes medios brinda a los usuarios un servicio deficiente.
En lo que va del día, ya llevan tres cortes de luz en Gonnet, Gorina y otras localidades aledañas. Las tarifas se ajustan pero no proporcionalmente a la calidad del servicio ya que ante la primera lluvia, viento o tormenta eléctrica y hasta a veces sin que haya ninguno de estos fenómenos, la luz se corta.
Con la falta de energía, llega el fastidio de los usuarios con cortes a toda hora. Esta madrugada, el sueño de varios vecinos se vio interrumpido por dos cortes de luz. No queda más remedio que levantarse, desenchufar todo y tomar los recaudos, no sea que vuelva con más tensión y nuestros electrodomésticos en lugar de envejecer con los cortes abruptos pasen a mejor vida.
Durante la tarde, las corridas para desenchufar la heladera, la TV, las computadoras y otros artefactos volvió a repetirse.
Y así nos tienen con el corazón en la boca y el bolsillo roto, porque al mal servicio se suman los aumentos en la tarifa.
¿En qué lugar del mundo suceden estas cosas? Aquí, en nuestra provincia donde los entes reguladores no regulan, no controlan y parecieran que hasta ofician de voceros de las prestadoras con un atisbo de explicación para justificar su inacción y el mal servicio.
Pero, bueno, seguimos padeciendo bajo la órbita de Edelap que nos tiene de rehén, porque ni siquiera podemos elegir otra opción.