Foto: Diagonales |
"Fue como una bomba. Nos aturdió y salimos corriendo hacia abajo, sin saber muy bien hacia adónde. Cuando llegamos a la entrada no lo podíamos creer. Fue un milagro que no haya matado a nadie", dijeron testigos que fueron consultados.
Un empleado de la dependencia, Marcelo, había estado en las escaleras sobre las que cayó el techo minutos antes. "Si hubiera pasado unas horas antes era un desastre porque por ahí entra la mayor
cantidad de gente y muchos empleados bajan a fumar ahí".
Tras la caída del techo el lugar fue perimetrado y se prohibió la circulación por el lugar por precaución. Parte del alero quedó agarrado por una parte.
Fuente: lanoticia1.com