Río de Janeiro amaneció con vidrieras y vehículos rotos luego de los enfrentamientos entre grupos de manifestantes y policías. Hubo 62 heridos y 10 detenidos. Este viernes, evacuaron dos ministerios en Brasilia por amenaza de bomba.
El centro de Río de Janeiro mostraba este viernes vidrieras y vehículos rotos, entre otros deterioros, tras los choques entre grupos de manifestantes y policías, sobre el final de una manifestación de protesta que convocó a unas 300.000 personas, y que de dejó un saldo de 2 muertos, 62 personas heridas y 10 detenidos.
Pese a que la multitud en Río de Janeiro marchó de manera pacífica, la manifestación terminó violentamente cuando un pequeño grupo supuestamente intentó invadir la sede de la alcaldía y atacó a pedradas a la policía, según consigna la agencia EFE.
La policía reprimió a estos manifestantes con gases lacrimógenos y balas de goma, y protagonizó una verdadera batalla campal que se extendió por varias calles.
Algunos de los manifestantes, dispersados por los agentes antidisturbios, se dirigieron hacia diferentes locales del centro de la ciudad y en su camino destruyeron señales de tránsito, autobuses y agencias bancarias, y encendieron fogatas en recipientes de basura con las que intentaron armar barricadas.
Uno de los palcos del llamado Terreirao do Samba -el "Sambódromo" ubicado en el barrio de Lapa-, fue incendiado, así como una cabina de policía.
La confusión fue aprovechada por algunas personas para saquear almacenes. Otro grupo saqueó un vehículo de una red de televisión al que después lo prendió fuego.
La policía persiguió a los manifestantes por las calles, llegó a cercar a unas 200 personas refugiadas en una universidad pública y lanzó gases lacrimógenos hasta en Lapa, un barrio bohemio que concentra numerosos bares y del que decenas de clientes tuvieron que huir despavoridos.
La manifestación de Río de Janeiro fue la mayor entre las que comenzaron la semana pasada en todo el país y que tan sólo anoche movilizaron a más de un millón de personas en al menos 80 ciudades.
Además de Río de Janeiro, también se registraron enfrentamientos con la policía en las manifestaciones realizadas en ciudades como Brasilia, Campinas, Porto Alegre, Vitoria y Salvador.
AMENAZA DE BOMBA
La policía militar brasileña evacuó este viernes el edificio que alberga los ministerios de Cultura y del Ambiente, en la llamada Explanada de los ministerios de Brasilia, tras una amenaza anónima de bomba, reportó el diario Correio Braziliense.
El Ministerio de Cultura fue uno de los atacados durante la manifestación de anoche que reunió a miles de personas, lugar donde ahora se encuentra una brigada de explosivos, consignó la agencia ANSA.
LUTO POR MANIFESTANTE MUERTO
La prefectura de Ribeirao Preto decretó hoy tres días de luto oficial por la muerte del
estudiante Marcos Delefrante, de 18 años, atropellado por un vehículo durante la manifestación de protesta de anoche.
Las autoridades del municipio del estado de San Pablo, a 313 kilómetros de la principal ciudad económica del Brasil, informó que Delefrante será enterrado esta tarde a las 16 en el Cementerio del Buen Pastor, en Jardín Zara.
Durante esa manifestación fueron atropellados por un auto particular Marcos Delefrante y otros doce manifestantes, cuatro de los cuales resultaron con heridas, según consigna la agencia estatal ABR. Uno de esos heridos sería la segunda víctima fatal de los hechos.