Vecino nos escribe:
"Anoche fue el primer viernes que pudimos descansar, sin desmanes de las motos que explotan. Será que se fueron de vacaciones o las autoridades están actuando.
Hace años y años que ese lugar se fuma tabaco del demonio, y jamás molestaron a nadie. Su mundo, su vida. Pero aparecieron motos sin patente, sin luces y caños de escape libre y no tienen horario de la madrugada nos vuelven locos.
La gente de los alrededores, la mayoría abuelos que pegaban unos saltos de un metro en la cama asustados. Llamas a la policía y muchas veces venían, pero cuando te dicen corto y transmito, a los cinco minutos arrancaban y se iban pero a la hora volvían desafiando a todo. La policía te pide el nombre cuando la señora gobernadora dijo que para denunciar cualquier hecho era anónimo.
Fíjense que hay un jardín maternal donde le orinaban, defecaban, con la delegación en frente y la subcomisaria a una cuadra y media. Hoy tuvieron de enrejar 8 metros de largo por 5 de ancho, en vez de poner vigilancia. Las plazas son publicas y esta muy bueno que los ciudadanos las visiten, escuchen música pero no creo que este bien que sea a las tres de la madrugada y paren tres o cuatro autos con bocinas y a 800 decibeles.
Es una tortura, no sabemos quien les da la llave de un lugar que esta al lado del jardin y lo usan para hacer fiestas los jóvenes y en realidad no molesta eso, quien no fué joven y le gustaba la música, pero después se descontrola y estaban hasta las 9 de la mañana con la música a todo lo que da.
Hasta ahí les puedo narrar los hechos tristisimos para los vecinos que vivimos en los alrededores pero si hay tantas motos a esa hora saque sus conclusiones.
Gracias a ustedes que se animaron a sacar una nota sobre la connivencia que había en ese momento, las cosas se calmaron, un poco, y los felicito por tener el coraje de encarar estas cuestiones que el ciudadano común le tiene miedo. Que Dios los bendiga".
