Es así que apelaron a lo más vergonzoso de la manipulación política. Arriados como ganado hordas de trabajadores y trabajadoras de las cooperativas municipales salían por la puerta principal del palacio y cruzaban calle 12 con evidente cara de disgusto.
- ¿Qué pasa? - nos atrevimos a preguntarle a uno de los precarizados trabajadores de las cooperativas.
Ofuscado contestó: -"El hijo de p...ta de Bruera nos manda a hacer bulto para canal 13. Si la gente no vino, nosotros no tenemos la culpa. Nuestra jornada labora ya terminó. No tenemos por qué estar acá. Tendrían que dejarnos ir a nuestras casas".
Vergüenza, indignación, tristeza en ese rostro que rondaría los 50 años y que se sentía usado vilmente para un evento que no tiene nada que ver con las cooperativas y por lo bajo sumó otra trabajadora que les estaban pidiendo que lleven a sus familias, hijos e hijas para tapar lo que el patético drone puesto por la producción de canal 13 demostraba: la convocatoria era un fracaso.
La preguntas es: ¿hasta cuándo la política va a seguir arreando como ganado a la gente? ¿Por dónde pasa la dignidad de un trabajador? ¿Qué tiene que ver una frívola telenovela con la verdadera función de un trabajador municipal? ¿Cuándo priorizarán los funcionarios en su agenda la obra por encima del circo? El 2 de abril reflejará en la memoria un Estado ausente cuando la gente más los necesitó y todos en nuestra ciudad tenemos un padre, amigo, hermano o conocido que lo pagó con su vida. ¿Diremos algún día, circo nunca más?
